Tenia un rato pensando si se acercaba a saludar a Atari o no. Muy en contra de sus deseos lo conocía, tal vez por el tiempo o por instinto, pues conocer a los hombres siempre le había sido de utilidad.
Sabia bien que después de su ultimo encuentro Atari le guardaba resentimiento, y no era para menos, Monica en su cama y no en la de el. Un golpe duro para el ego y sus derivados. Tal vez en el fondo Sexo Casual tenia la esperanza de ligar a alguien para desechar esa posibilidad, y no es que no se le acercara algunos candidatos pero tenia todo el día con el antojo de un pase y requería para enredarse esa noche algo mas que un buen cuerpo acompañada de una botella de vino. Esa era su pequeña casería y su versión de la selección natural, nadie que no se le acercara con el letrero de – Estoy forrado en coca y te hace sentir como princesa- no le interesaba.
Sexo Casual era toda una experta en leer la expresión corporal e interpretar el lenguaje, si alguno de sus amorcitos le decía - ¡Espera! No esta bien, tengo novia- y tenia bien plantada una erección, lo que en verdad quería decir es no le digas a nadie y me muero por una mamada, un – Esto no esta bien para ti, tu en verdad me gustas- significaba que estaba tan pasado que no funcionaba, o un – Me moría por hacer esto – que en realidad le decía soy tu idiota has con migo lo que quieras. Aun que tenia sus habilidades bien desarrolladas no tenia ninguna necesidad de emplearlas para notar que Atari esa noche estaba forrado: sus movimientos lentos y profundos, su cara cansada con pupilas dilatadas y expresión de asombro y sobre todo su actitud, lo que para Atari era proyectar que era un chingon a ella le decía – Mírame soy un caliente y si mueves bien el culo tendrás lo que quieras-.
Hizo un análisis rápido de la situación, acomodo su escote y se convenció de que era una pendeja, una de las mas pendejas del lugar, pero no era cualquiera, pues aun que le costaba aceptarlo como dijo Atari – Puta-. Quizás por diversión, coca o por cualquier otro pretexto. Pero sabia que no existe hombre que se resista a una puta pendeja. Ni quiera Atari con todo y sus litros de ego. Por que había que ser muy puta y muy pendeja, para aguantar sus desplantes o la conversación pretenciosa que le tiraba, y ella poniendo cara de me iluminas la mente, para subirle el ego al muy cabron.
Sabia bien que después de su ultimo encuentro Atari le guardaba resentimiento, y no era para menos, Monica en su cama y no en la de el. Un golpe duro para el ego y sus derivados. Tal vez en el fondo Sexo Casual tenia la esperanza de ligar a alguien para desechar esa posibilidad, y no es que no se le acercara algunos candidatos pero tenia todo el día con el antojo de un pase y requería para enredarse esa noche algo mas que un buen cuerpo acompañada de una botella de vino. Esa era su pequeña casería y su versión de la selección natural, nadie que no se le acercara con el letrero de – Estoy forrado en coca y te hace sentir como princesa- no le interesaba.
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4 comments:
vezz te salen tan naturales.. es como escucharte, una conversacion cotiana , eso es lo que mas me agrada de como escribes.
asi quise decir COTIDIANA..ando medio dislexica, es que me pones nerviosa..
me like, me like... el retrato del ego masculino me parece genial, me he pasado hnoras platicando al respecto y es un tema que me agrada bastante...intento entenderme, jeje
Sigue la maravilia escrita, y si es como conversar contigo :)
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